Anaís se diluye...

Desde hace un tiempo Anaís ha estado en receso, no ha tenido tiempo ni ánimos para escribir ni contactarse con sus amigos y cibercolegas... tampoco para sus actividades habituales como recorrer sus amados acantilados, bailar desnuda bajo la luna, cosechar mandrágoras o recolectar sabia de algún cuerpo. Es que La Otra insiste en marginarla de la vida y ella ya no tiene fuerzas para exigir su espacio.

Últimamente la Otra acapara todo el tiempo para ella, es que está saturada de trabajo, hubo un “gran incendio que apagar” trabajó entre 12 y 16 horas diarias... (no respetó ni los fines de semana que son dominio habitual de Anaís...), y luego de que pasó la tormenta, se olvidó "accidentalmente" que nuestra Anaís estaba encerrada en la bodega del fondo.

Hoy La Otra se siente culpable (típico en ella) y empuja a Anaís a escribir... estamos ambas frente al computador... Ella observa antentamente (Como una madre que vigila las tareas de su hija... ) Llevamos dos horas tratando de sentir algo, de lograr esa conexión habitual antes de escribir .... no ha sido posible, así que lo escriba hoy es una mirada crítica, casi ajena a nosotras.

No sé, tal vez Anaís se diluye... tal vez ya no suceden las cosas que hacían mágica la existencia. Anaís se describió una vez aceptando orgullosa que "a veces confunde la poesía con la realidad", tal vez nuestra Anaís en estos días días de encierro se encontró de frente con SU realidad y vio que ya no hay poesía, vio la podredumbre de su alma y la basura con que contamina la vida de otros.

Tal vez, sólo tal vez, Anaís asumió que la poesía esta sólo en un montón de símbolos que llamamos letras... amalgamadas en gastadas frases sin sentido.

Hoy Anaís se resiste a dejar su retiro espiritual, está cansada, incluso ha pensado en suicidarse... ( o por lo menos borrar su blog) si la culpa propia de la Otra no la contuviera... ay, que sería de Anaís. ( Anaís, es el impulso vital y la otra el cable a tierra. Ambas se necesitan.)


Hoy el alma está llena de melancolía... dudo si organizar un emotivo funeral a Anaís o conjurar algún sortilegio para salvarla del limbo donde se ha automarginado.


Abrazos....